Un mes igual de caótico que todo los anteriores en mi vida, pero esta vez…con un final dulce y mucho más feliz, las ansiadas vacaciones.
Mil planes tengo apuntados y guardados bajo llaves para mis dos largos meses de vacaciones, planes que espero que este año no se queden en solo intenciones, sino que se realicen todos.
Pero bueno, antes de hablar de vacaciones, contaros un poco que he venido haciendo este mes de Junio.
Leyendo
Mi nueva obsesión es inculcar en mis hijos el gusto por la lectura. Me apasiona leer, pero no recuerdo desde cuando no leo un libro del tirón, con del tirón me refiero a leerlo sin parones de semanas y semanas entre capitulo y capitulo.
La lectura, para aquellos que tenemos hijos pequeños es un preciado bien de dificil disfrute, así que he decidido que quizás el truco sea enseñarles a amar los libros tanto como yo…y he descubierto el maravilloso mundo de los libros infantiles y me he sorprendido de lo que ellos se entretienen y lo que a ellos les gusta también pasar un rato tranquilos leyendo juntos.
Me parece que abriré una nueva sección en el blog de libros infantiles muy pronto, para ir enseñando nuestras nuevas y mejores adquisiciones,
Fotografiando
Más que fotografiando, que también, este mes estoy inspirándome con mi nuevo libro de fotografía de familia que encontré por la web.
Ya os he comentado que a principios de año hice el curso de fotografía de familia LAZOS de Jackie rueda, y fue para mi, un antes y un después en el modo de fotografiar a mis hijos, mi familia y todo mi entorno en general.
Aprendí a ver lo imperfecto y a fotografiarlos tal cual son, sin hacerles posar ni alterar su realidad para la foto y sobre todo aprendí a esconderme, a hacer fotos sin ser vista, sin molestar, para tenerlos el día de mañana tal cual son ahora.
Algunos de mis trucos para no cometer los errores que cometía antes ya os los dejé en este post. Fotografiando que es gerundio.
Cocinando
Cocinando poco y a toda. Lo sé…no está bien decir eso en un blog de cocina, pero esa es la principal consecuencia de mi falta de tiempo, que mi cocina pierde un poco de cariño, pero hemos sacado algunos ratos para cocinar, juntos claro, porque lo de relajarme cocinando con música clásica de fondo y una copa de vino como solía hacer, eso es, por ahora, un dulce recuerdo.
Y cocinar juntos es divertido, caótico y agotador a la vez, pero al final conseguimos hacer cosas ricas y disfrutarlas juntos, los niños comen mucho mejor cuando han participado en la preparación de la comida, aunque sea solo poniendo la mesa. Esta vez conseguimos hacer una tarta como Dios manda, de obleas y chocolate sin horno, que publicaré en unos días, ya que es ideal para hacer con niños y además tuvimos un pichel de excepción que descubriréis muy pronto.
Piscineando
Piscina, piscina y más piscina, para calmar este calor sofocante que tenemos en el sur estos días y que, aunque esperamos se calme un poco, nos seguirá acompañando unos meses más.
En unos días os traigo un nuevo post con planes para niños estas vacaciones, pero de momento os dejo enlace al que os puse por si os veis en un aprieto. Preparados, listos…VACACIONES.
